Venezuela. Monseñor Mario Moronta: no nos dejen solos
Centro América tendrá el sábado un nuevo beato:
el Hermano
Santiago o James Miller mártir de la educación. Pertenecía a la orden de
los Hermanos de las Escuelas Cristianas, y será beatificado en
Huehuetenango, Guatemala.
Santoral: San Nicolás de Bari (el verdadero SANT-NICOLAUS o SANTACLAUS...)
Carmen Sallés y Barangueras (9 de abril de 1848, Vich, Barcelona – 25 de julio de 1911, Madrid) fue una religiosa española conocida por fundar la Congregación de las Religiosas Concepcionistas Misioneras de la Enseñanza, bajo el principio de igualdad entre hombre y mujeres, considerando que la mujer de finales del siglo XIX debía ser digna de una educación académica y de valores.
Es la segunda de diez hermanos. Estudió en la Orden de la Compañía de María en Manresa. Ingresa en el noviciado de las Adoratrices de Barcelona, pasando después por una Congregación de Religiosas fundadas por el P. Coll dedicadas a la enseñanza y educación: las Dominicas de la Anunciata. Encuentra finalmente su misión al fundar en 1892 bajo la protección del Obispo de Burgos, la congregación de Religiosas Concepcionistas Misioneras de la Enseñanza, que actualmente sigue dedicándose por diversos países entre los que se encuentra España, Brasil, Venezuela, República Dominicana, Haití, México, Japón, Corea, Filipinas, India, Indonesia, Estados Unidos, República Democrática del Congo, Camerún, Guinea Ecuatorial, República del Congo, Roma. Beatificada el 15 de marzo de 1998, y canonizada el 21 de octubre de 2012. Miles de alumnos siguen creciendo en centros concepcionistas guiados por su ejemplo. Pionera del auténtico FEMINISMO
Mt 9 27-31 EVANGELIO EN AUDIO
Isaías 29,17-24
Aquel día, verán los ojos de los ciegosAsí dice el Señor: "Pronto, muy pronto, el Líbano se convertirá en vergel, el vergel parecerá un bosque; aquel día, oirán los sordos las palabras del libro; sin tinieblas ni oscuridad verán los ojos de los ciegos. Los oprimidos volverán a alegrarse con el Señor, y los más pobres gozarán con el Santo de Israel; porque se acabó el opresor, terminó el cínico; y serán aniquilados los despiertos para el mal, los que van a coger a otro en el hablar y, con trampas, al que defiende en el tribunal, y por nada hunden al inocente."
Así dice a la casa de Jacob el Señor, que rescató a Abrahán: "Ya no se avergonzará Jacob, ya no se sonrojará su cara, pues, cuando vea mis acciones en medio de él, santificará mi nombre, santificará al Santo de Jacob y temerá al Dios de Israel. Los que habían perdido la cabeza comprenderán, y los que protestaban aprenderán la enseñanza."
Una vida sana y recta, en absoluta equidad, es lo que anuncia el profeta Isaías para el pueblo de Dios. Es un futuro promisorio, que está al alcance de la mano. Sin embargo, tres tipos de gente la impiden: los tiranos, los cínicos y los que urden maldad. Tirano es el que impone su voluntad al precio del derecho. El tirano se convierte en un usurpador porque excluye a Dios de la comunidad; muchas veces lo deja fuera mientras usa su nombre y sus símbolos religiosos. Los cínicos son los que no tienen compromiso alguno, ni siquiera consigo mismos; mienten como si la verdad no pesara ni tuviera consecuencias. Los malvados son personas que buscan dañar a miembros de la propia comunidad. Hoy, el profeta de Cristo Jesús no puede sino abrir los ojos y los oídos para “ver, juzgar y actuar” para que la salud de Dios, su santidad, llegue pronto a los más vulnerables, y desaloje al tirano, al cínico y al malvado.
Argentina: Indulgencia plenaria para el Año Jubilar Mariano
Preparamos la celebración del 8 de diciembre 
La Inmaculada Concepción
de la Bienaventurada Virgen María. Domingo 8 de diciembre de 2019
Primera lectura: Gén
3,9-15.20 Salmo: Sal 97,1-4 Segunda lectura: Rom 15,4-9
Evangelio: Lc 1,26-38
En la República Argentina,
cuándo el 8 de diciembre cae en día Domingo, tenemos la
autorización de la Santa Sede para celebrar la Solemnidad de la
Inmaculada Concepción y suprimir la celebración del segundo Domingo
de Adviento. Lo único que se modifica es la segunda lectura: no se
hace la propia de la Virgen sino la del 2º Domingo de Adviento.
Hoy disfrutamos de esta fiesta
de la Bienaventurada Virgen Madre. Lo que con claridad se vivía en
la fe de la Iglesia se afirmó dogmáticamente por la pluma del Papa
Pío IX el 8 de diciembre de 1854 en la Bula Ineffabilis
Deus. María es
realmente la “llena de gracia”, la que Dios “ha favorecido”,
la inmaculada, verdaderamente madre del único Salvador del mundo,
nuestro Señor Jesucristo. A veces se escucha decir que esta
celebración es como un “paréntesis” del Adviento. En realidad
es todo lo contrario. Es el Adviento en su mejor y más profunda
expresión. María es la Inmaculada, la madre purísima que dará a
luz al Niño Dios en Belén.
Son muchos los aspectos para
meditar en esta fiesta a la luz de los textos que la Palabra de Dios
nos ofrece. Presento tres breves puntos para la reflexión que serán
completados por lo que a cada uno el Espíritu le suscite a través
de la Escritura. Sintetizo estos puntos en tres expresiones tomadas
del mismo relato de la Anunciación: “no TEMAS…”, “¿CÓMO
puede ser…”, “no hay nada IMPOSIBLE para Dios”. Tres
palabras: TEMAS, CÓMO, IMPOSIBLE.
- “No TEMAS...”
Qué bueno escuchar de parte
del Ángel Gabriel, también para nosotros hoy, esta hermosa Palabra:
¡No TEMAS! Cuando miramos con profundidad nuestra vida es posible
que encontremos muchas cosas que nos dan miedo, TEMOR, incertidumbre,
zozobra, desesperanza... Lo que le pasa a María, también nos pasa a
nosotros. El futuro es incierto en muchos aspectos y puede generarnos
TEMOR y miedo. Es importante ver a qué cosas le tengo miedo. A veces
son situaciones superficiales, otras veces son situaciones más
estructurales y profundas... Debemos animarnos a desentrañar
nuestros TEMORES para presentárselos a Dios y que Él, a través de
su Ángel, hoy también nos diga: ¡No TEMAS!
¿A qué cosas TEMO hoy?
¿Qué situaciones me generan miedo? ¿Cómo veo mi futuro... el
futuro de mi familia, de la Iglesia, de la ciudad, del mundo...? ¿Qué
aspectos de la vida me generan estados de ansiedad o incertidumbre?
¿Qué implica para mí hoy que Dios a través de su Ángel me diga:
¡No TEMAS!?
- “¿CÓMO puede ser...?”
María se pregunta y nos
enseña a preguntarnos a nosotros mismos: ¿CÓMO...? Nunca está mal
preguntarse y preguntar si se lo realiza con actitud de respeto,
serenidad y sentido de fe en Dios. Son muchas las situaciones de vida
que llevan a preguntarnos CÓMO,
por qué,
para qué...
A veces tiene que ver con nosotros, con nuestro propio corazón.
Otras veces son preguntas referidas a las personas que amamos,
familiares y amigos. En otros casos las preguntas apuntan a los
grandes interrogantes por las situaciones de la humanidad en este y
en todos los tiempos: la vida y la muerte, la salud y la enfermedad,
la paz y la guerra, la unión y la división, la alegría y la
tristeza... No debemos tener miedo a preguntarnos y preguntarle a
Dios todo lo que afecte nuestro corazón y nuestra vida “¿CÓMO
puede ser…?”.
¿Cuáles son los
interrogantes más profundos de mi corazón hoy? ¿Me animo a
verbalizarlos y decir CÓMO? ¿Con quién/es los dialogo y los
comento? ¿Me animo, como lo hace María, con fe y respeto, a
preguntarle a Dios las situaciones de mi vida que me cuesta
comprender? ¿Intento, en mi vida de oración, mantener con el Señor
un diálogo cordial llevándole de manera cotidiana todas “mis
preguntas”? ¿Ayudo a que los demás se interroguen interiormente y
a que expresen sus preguntas más profundas?
- “No hay nada IMPOSIBLE para Dios”
Esta última frase toca un
aspecto esencial de nuestra fe: la grandeza y el poder absoluto de
nuestro Dios. Para Él: nada es IMPOSIBLE. Es momento de preguntarnos
si realmente creemos qué Dios tiene el poder. A pesar de que el mal
es fuerte
en muchas de sus manifestaciones, el poder de Dios siempre es más
grande y vence al
mal. Por eso debemos redescubrir que no somos nosotros, con nuestras
pobres fuerzas humanas los que vencemos, sino que es Dios con su
poder el que vence en nosotros porque para Él nada es IMPOSIBLE.
Donde todo parece perdido, donde todo parece terminarse Dios irrumpe
y cambia de raíz aquello que parecía no tener solución. Todo
nuestro poder radica en el poder de Dios. Dirá San Pablo de forma
magnífica: “Todo lo puedo en aquel que me conforta” (Fil 4,13).
Como a María, el poder de Dios nos hace fecundos, el Espíritu Santo
desciende sobre nosotros y el poder del Altísimo nos cubre con su
sombra. Entendamos de corazón que no hay nada IMPOSIBLE para Dios.
¿Soy un hombre, una mujer
de fe? ¿Confío en el poder absoluto de Dios? Mirando mi vida
actual: ¿qué implica para mí la frase "No hay nada IMPOSIBLE
para Dios"? ¿Dejo que el poder de Dios “toque” esos
aspectos de la vida que pareciera que no tienen solución? ¿Descubro
que soy “poderoso” no por mis capacidades sino por la acción de
Dios que me “cubre con su sombra”?
+Mons. Gabriel Mestre
Obispo de Mar del Plata
Argentina
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