NOVENA (19/11) Oración
inicial
En el nombre del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Contemplando tu
venerada imagen, ¡Virgen de la Medalla Milagrosa!, alabo a Dios por
el misterio de tu Concepción inmaculada, y te elijo, desde ahora y
para siempre, como Madre, abogada, intercesora ante el Amor divino,
reina y señora de todas mis acciones.
Yo te prometo,
Virgen purísima, no olvidarte jamás, y promover tu amor y el de tu
Hijo Jesucristo en los que me rodean. Madre tierna,desde este
momento, acepto ser tu hijo,sé para mí Modelo y refugio en esta
vida,y sostén a la hora de la muerte. Amén.
¡Oh
María, sin pecado concebida,ruega por nosotros que recurrimos a Vos!
DÍA
SEGUNDO:
“DIOS VISITA A SU PUEBLO”
Ayer
decíamos que hay muchas personas que “desean ver a Dios”.
Hoy vamos a ver cómo Dios mismo, y la misma Virgen, son quienes nos quieren visitar. Es muy normal que los amigos se visiten, se invitena comer para poder hablar con confianza e intimidad.
Nos cuenta el Evangelio que Jesús fue a visitar a sus amigos Lázaro, Marta y María.
Hoy vamos a ver cómo Dios mismo, y la misma Virgen, son quienes nos quieren visitar. Es muy normal que los amigos se visiten, se invitena comer para poder hablar con confianza e intimidad.
Nos cuenta el Evangelio que Jesús fue a visitar a sus amigos Lázaro, Marta y María.
En
esta familia ocurrieron cosas muy hermosas. A Marta le dirá
que “sólo
hay una cosa importante en la vida”:
entrar en comunión con Dios.
– La
Virgen María, recién embarazada, también fue de visita a
ver a su prima Isabel, para ayudarla
y para “hablar de sus cosas”. Y estas cosas eran lo que Dios les estaba haciendo: una era mayor y estéril, pero ya iba a ser madre. La otra, joven, María, y también iba a ser Madre por la gracia del Espíritu Santo. Hablaban de esta visita de Dios. Las dos juntas. Y rezaban y alababan a Dios.
y para “hablar de sus cosas”. Y estas cosas eran lo que Dios les estaba haciendo: una era mayor y estéril, pero ya iba a ser madre. La otra, joven, María, y también iba a ser Madre por la gracia del Espíritu Santo. Hablaban de esta visita de Dios. Las dos juntas. Y rezaban y alababan a Dios.
La
Virgen María, a lo largo de los siglos ha visitado a los
cristianos en muchos lugares.
Escuchemos
cómo cuenta Catalina su
visión
del 18 de Julio:
“Llegamos
a la capilla... El niño me condujo al Presbiterio, junto
al sillón destinado al Director.
Me puse de rodillas … Escuché un rumor, como el roce de un vestido de seda…Yo dudaba si era la Virgen.Pero el niño, que seguía allí, me dijo: “ES LA VIRGEN”. Me sería imposible decir lo que experimentaba en aquel instante.”
Me puse de rodillas … Escuché un rumor, como el roce de un vestido de seda…Yo dudaba si era la Virgen.Pero el niño, que seguía allí, me dijo: “ES LA VIRGEN”. Me sería imposible decir lo que experimentaba en aquel instante.”
¿Qué
podemos decir nosotros cuando nos visita alguien?.
Recordemos,
también, que aunque durante todo el día no haya venido
nadie a saludarnos o no haya sonado el teléfono, nunca
hemos estado solos porque Dios siempre está con nosotros y la Virgen
nunca se ha ido de nuestra casa.
Oracion
final
• Después de
lo que hemos escuchado y meditado, ¿por qué podemos dar gracias?.
•¿Qué es lo
que queremos pedir a Dios por intercesión de la Virgen de la Medalla
Milagrosa …?
Todo lo que hemos
pedido por intercesión de la Virgen se lo pedimos a Dios con la
oración que Jesucristo nos enseñó:PADRE NUESTRO …
Y
terminamos con esta oración de bendición:
“Que
el Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna”.
Zaqueo es el jefe de cobradores de impuestos de Jericó y es un hombre muy rico. Los recaudadores de impuestos eran despreciados por ser colaboradores de los romanos y responsables directos de los onerosos impuestos. Su cargo también traía el desprecio religioso, eran considerados impuros, pecadores. El texto que vemos hoy es uno de búsqueda y encuentro. Por un lado, Zaqueo busca a Jesús y por otro, Jesús encuentra a Zaqueo, le llama por su nombre y se invita a su casa. Así es la doble dimensión de la gracia: don gratuito de Dios que requiere de nuestra voluntad para ser recibida.
Al reconocer a Jesús como su Señor, Zaqueo es capaz de librarse de la esclavitud del dinero y devolver a los pobres lo que es justo y por tanto recibe la palabra de salvación. Porque a eso ha venido Él. A salvarnos. Hoy día, ¿en qué consiste nuestra conversión para obtener la salvación? ¿Qué sería concretamente dar la mitad de nuestros bienes?
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