22 DE FEBRERO-LUNES CÁTEDRA DE SAN PEDRO

Mt 16,13-19
En aquel tiempo, llegó Jesús a la región de Cesárea de Felipe y preguntaba a sus discípulos: "¿Quién dice la gente que es el Hijo del Hombre?" Ellos contestaron: "Unos que Juan Bautista, otros que Elias, otros que Jeremías o uno de los profetas". Él les preguntó: "Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?" Simón Pedro tomó la palabra y dijo: "Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo" Jesús le respondió: "¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás! Porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del Reino de los Cielos. Lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo".
1.Lo importante, en esta festividad litúrgica y en el momento histórico que está viviendo la Iglesia, no es tanto precisar -una vez más- el significado de este evange­lio, sino más bien tomar conciencia de lo que esta celebración y este texto evangélico nos vienen a decir en la situación que vivimos. Es un hecho que el actual obispo de Roma, el papa Francisco, está cambiando el modo de ejercer el papado en la Iglesia. Y lo está haciendo de forma que este nuevo papa, al tiempo que ejerce una enorme atracción sobre los pobres y los que sufren, produce un más o menos disimulado rechazo en los ambientes más conservadores y clericales.
2. Aunque es cierto que la fiesta de la "Cátedra de Pedro"se celebraba ya a mediados del s. IV (así consta en la Depositio Martyrum), no es menos verdad que la Iglesia, hasta el s. X, fue una Iglesia sinodal. Es decir, una Iglesia que reconocía el primado del obispo de Roma, pero que era gobernada por los sínodos nacionales o regionales. O sea, era una Iglesia menos concentrada en la "Cátedra de Pedro". Y más participativa. Lo que no rompía la unidad de la Iglesia. Cada sínodo (nacional o regional) empezaba por afirmar su comunión con toda la Iglesia. Lo mismo que el papa se sentía ligado por los cánones de los sínodos (cf. Hincmaro, Benedictus Levita, san Bonifacio, san Isidoro de Sevilla. Cf. K. H. Morrison. Y. Congar).

  1. Es decisivo que los creyentes en Jesús estemos cada día más unidos al papa Francisco. Y a la tradición más original de la Iglesia. Cuando la Iglesia tuvo fuerza y vitalidad para ser factor determinante de la cultura y de la sociedad de Occidente y de su influjo en el mundo y en la historia.

Comentarios